El síndrome silla vacía: pasar las fiestas sin un ser querido
No me cabe duda de que todos hemos experimentado el síndrome de la silla vacía en un momento u otro de nuestras vidas. El vacío se siente especialmente durante las vacaciones, cuando la familia y los amigos están lejos.
Pero, ¿qué es lo que hace que este sentimiento sea tan complejo, y cómo podemos superarlo? En esta entrada del blog, exploraré el síndrome de la silla vacía y hablaré de las formas en que todos podemos hacer frente a sus síntomas.
Algo difícil de sobrellevar
Cuando fallece un ser querido, es natural sentirse aislado, solo e incluso un poco apenado. Sin embargo, la tristeza puede a veces descontrolarse y conducir a una depresión y desesperación aún más profundas.
Esto se conoce como Síndrome de la Silla Vacía, y es frecuente entre las personas que han perdido a un ser querido. Hay algunas cosas que puedes hacer para afrontarlo.
Recuerda que no estás solo. Muchas personas se sienten así y encuentran apoyo en los demás. Habla con alguien sobre tus sentimientos si sientes que lo necesitas. Y recuerda que te quieren y te apoyan. Puede que sientas que nunca vas a seguir adelante, pero con el tiempo volverás a encontrar la paz.
Lidiar con las emociones y pensamientos
Normalmente, este sentimiento se asocia a echar de menos a alguien que ya no está vivo, pero también puede estar causado por otras pérdidas, como el divorcio o la pérdida del trabajo. Los efectos del síndrome de la silla vacía pueden ser duraderos y complejos.
El dolor emocional, la depresión y los pensamientos suicidas son síntomas comunes. Algunas personas también experimentan síntomas físicos, como dolores de cabeza, de espalda o problemas digestivos. Aunque no existe una causa clara del síndrome de la silla vacía, las investigaciones sugieren que hay varios factores que pueden contribuir. Estos factores incluyen la pérdida, el dolor y la depresión.
El impacto del síndrome de la silla vacía puede ser devastador, pero es importante recordar que hay ayuda disponible. Con el apoyo adecuado, es posible seguir adelante tras experimentar este tipo de pérdida.
Extrañar al ser querido y disfrutar las fiestas
Es una época del año muy dura cuando tienes que enfrentarte a la pérdida de un ser querido. Con tantos recuerdos y experiencias compartidas entre vosotros, las fiestas pueden ser especialmente difíciles de superar.
Por supuesto, siempre hay formas de hacer que las fiestas sean especiales, independientemente de las circunstancias.
- Aprovechar formas creativas de recordar y honrar a esa persona, como crear una exposición significativa o compartir historias sobre ella con tus seres queridos.
- Intenta disfrutar de las fiestas sin pensar constantemente en esa persona, sobre todo si ya no quiere formar parte de ellas.
Formas de alegrar las fiestas (incluso si tu ser querido no está presente)
Para muchas personas, las fiestas son un momento para reunirse con sus seres queridos, intercambiar regalos y disfrutar de la compañía de los demás. Pero para otros, la temporada es solitaria y desoladora, sin la presencia de sus seres queridos.
Aunque hay varias maneras de intentar hacer más llevaderas las fiestas, como aprovechar las oportunidades de pasar tiempo con los amigos y la familia, o decorar tu casa de forma que evoque recuerdos de tu ser querido, nada es comparable a estar rodeado de su presencia física todos los días. Pero también hay algunas cosas que puedes hacer para que las fiestas sean un poco menos dolorosas.
Cuando tengas la tentación de aislarse, evita pasar tiempo a solas. En su lugar, organiza actividades de grupo que te ayuden a mantenerte conectado con otras personas. Y si sientes que estás completamente solo, rodéate de fotos, recuerdos o flores que te recuerden a la persona que tanto echas de menos.
Haciendo estas sencillas cosas, estarás dando pequeños pasos para aligerar la carga del síndrome de la silla vacía.
Aunque el síndrome de la silla vacía es un sentimiento común durante las fiestas de fin de año, no tiene por qué serlo.
Si te sientes solo, hablar con alguien puede ayudarte, salir a pasear o darte un baño.
Recuerda que la tristeza es una parte normal de la vida y que siempre hay alguien que se preocupa por ti.